martes, 7 de julio de 2009

Carritos sin ley/ Cada vez más accidentes de tránsito “inimputables”

(Cuesta creer que en Paraná siga sin resolverse una situación histórica que desde hace muchos años se viene repitiendo: la circulación de carros de tracción a sangre que nos habla de una problemática mucho mayor que la mera regulación..., va la nota:)

Suman más de 500 los carros tirados por caballos que circulan en Paraná, comandados por adultos, jóvenes y niños en situación de pobreza. “Cuando se producen accidentes de tránsito las víctimas no tienen a quién responsabilizar, porque los carros son inimputables”, advirtió la vicepresidenta de Canadian Voices for animal, María Inés Bacigalupo, quien reiteró un reclamo “histórico” a la comuna.

Por su parte, los dueños de los carros se resisten a perder su medio de transporte y de vida. La exigencia de que la comuna tome cartas en el asunto de la circulación de carros de tracción a sangre en el microcentro de Paraná, resurge cada vez que se menciona la cantidad de accidentes de tránsito, denunciados o no, que se registran día a día en la capital entrerriana.

Informes policiales arrojaron que el 23 de julio de 1999, Álvaro Simón Zamarripa murió en un accidente ocurrido en calles Rondeau y Salvarini. El joven, de 20 años, retornaba de trabajar en su moto y fue interceptado sorpresivamente con un carro de tracción a sangre conducido por un menor. El chico murió como consecuencia de las lesiones sufridas y el caso no tuvo una resolución.

En tanto, el 27 de agosto de 2006, Casildo Rodríguez, de 24 años, murió al chocar una moto contra un carro en la intersección de las calles Los Minuanes y 1000 en el barrio Anacleto Medina. Rodríguez falleció en el acto al impactar con su cabeza contra una de las varillas guías del carro.

El carro tirado por un caballo, era comandado por Julio Miño, de 26 años, quien iba acompañado de su cónyuge y su hija.
Además, hacia diciembre de 2007 un caballo se soltó en el centro y aplastó un Fiat 600, en la esquina de las calles Córdoba y Cervantes, en un accidente que no registró lesionados.
A la lista de accidentes, que crece día a día, se suma el maltrato de los caballos y la necesidad de analizar una práctica cultural de sectores de pobreza que encuentran en “el carrito” un medio de transporte, trabajo y vida.

Persistente advertencia

En diálogo con AIM, Bacigalupo, afirmó que desde la organización crece la preocupación por la problemática y remarcó que “los carros tirados por caballos siguen circulando por la ciudad y son inimputables”.
A ello agregó que “cada tanto hay accidentes con peatones o vehículos y la gente no tiene a quien responsabilizar por el problema” y responsabilizó al municipio, “porque no cumple con la ordenanza que prohíbe la circulación de los carritos”.

Más adelante, informó que Canadian Voices for Animals mantiene un lugar, al que denominan “santuario”, donde residen 86 ejemplares de animales (gatos, perros y caballos) que fueron rescatados de situaciones de maltrato, donde son curados y protegidos.

Por eso, solicitaron a los vecinos que acerquen donaciones para el mantenimiento del lugar a la Asociación El Crisol, en 25 de Junio 295. Allí hay una alcancía para recibir dinero o bien se puede dejar bolsas de alimento.

La vida sobre ruedas
Por su parte, quienes conducen carros de tracción a sangre, encuentran en este medio una práctica cotidiana que se incorpora desde la niñez: “aprendí a cabalgar a los ocho años y el caballo y el carro son parte de mi vida”, contó a AIM Ezequiel P, de 27 años, quien se dedica al cirujeo con sus hermanos.

“En mi carrito tengo todo, la ropa, las bolsas y voy cargando lo que junto por la calle, ya que salgo muy temprano a la mañana y vuelvo a la noche al barrio”, relató y remarcó: “nunca tuve un accidente, ni choqué a nadie, porque trato de manejar bien: lo hago desde chiquito”.

Además, enfatizó: “no dejaría este carro por nada del mundo, es lo que me da de comer y arriba del caballo siento una especie de libertad, me escapo”.

Qué dice la ordenanza

El 27 de junio de 1992 el Departamento Ejecutivo Municipal (DEM) firmó el decreto 1.212 mediante el que se estableció la prohibición de la circulación de los carros de tracción a sangre dentro del microcentro.

El artículo 10 del capítulo 5º del digesto municipal de 1992 estipula las zonas donde se prohíbe la circulación de carros con tracción a sangre.
Según reza el mencionado artículo, “no podrán circular en el área comprendida entre bulevard Racedo, Ituzaingó, Ameghino, Patagonia, Bertozzi, Los Vascos, Laurencena, Ramírez y avenida De las Américas. En tanto se prohíbe la circulación total de vehículos a tracción a sangre y carros de mano en las áreas céntricas”.

“Comprobada una transgresión, el vehículo será trasladado al corralón municipal y depositado en el mismo, pudiendo ser retirado por su propietario, previo pago de la multa aplicada y de los derechos de estadía y traslado que corresponda”.

Por Noralí Moreyra para AIM, www.aimdigital.com.ar

3 comentarios:

Conversaciones de todo dijo...

Aqui en Venezuela también pasan asidentes cada ves hay asidente y tropellado también, en Caraca hay siempre tropellado de motolisados.
horita estamos un pais que esta de un tirano. Que no hay trabajo no hay comercio, de social, y seguros social.
Nose con sigue azucar, nose carner ni mantequilla, ni nada.

Mimi Rocha dijo...

Hola los invito a visitar
proyectocaballoslibresmardelplata.blogspot.com
tambien a el facebook el grupo de proyecto caballos libres mar del plata los caballos no estan solos
les cuento que estan matando a los caballitos los rebientan atados a los carros mueren mas de los golpes y del hambre que les hacen pasar los esclavizadores quelos desgastan trabajando de sol a sol que lo que mueren en accidentes
tengo mucho que contar el que quiera que se comunique al correo
proyectocaballoslibresmardelplata@hotmail.com
muy buena la nota y que triste que le falten alimentos a las personas un abrazo Mimi Rocha

Mimi Rocha dijo...

hola me olvide de preguntar donde sucede esto exactamente y si por favor me pueden contactar gracias